REPRODUCCION DE BOVINOS

Por los Drs. FERESIN F. y TABOADA A.

De la Cátedra de Teriología, Facultad de Veterinaria,

Universidad de Esperanza, Provincia de Santa Fe, Argentina.

(Aparecido en la lista de discusión Vacas-L)

Para que el tambo logre sus metas de producción y rentabilidad es necesario un funcionamiento reproductivo satisfactorio, ya que éste afecta directamente a la producción diaria, progreso genético, política de rechazo y muchos otros aspectos de importancia económica.

Una adecuada información, es la base para realizar un manejo efectivo tendiente a lograr los objetivos planteados. Las distintas mediciones de eficiencia reproductiva, hechas a partir de dicha información, indefectiblemente debe hacerse en forma diferente, dependiendo de que el sistema de manejo sea estacional o continuo.

En rodeos con servicio estacional el énfasis del manejo se halla circunscripto a períodos cortos del año, alrededor de las épocas de servicios y partos. Por lo tanto en este caso es imposible tomar medidas y esperar los resultados en el tiempo porque todo pasa muy rápido, por lo de los períodos antes citados. Se debe tratar de concentrar todas las actividades de la explotación para preñar la mayor cantidad de vacas y utilizar más asiduamente al profesional en los momentos previos y durante el período de servicios, para poder controlar si los porcentajes de celo y preñez son los adecuados y así tomar decisiones con premura.

En rodeos con servicios a lo largo del año es posible observar y evaluar la performance reproductiva mes a mes y proyectar resultados hacia futuro. Esto le permitirá al profesional a cargo recomendar con mayor tranquilidad los cambios a efectuar en el manejo de animales y evaluar los efectos de los mismos en los próximos meses.

La esencia del asesoramiento en el manejo reproductivo para los sistemas pastoriles es un continuo monitoreo, usando registros históricos, observaciones actuales y exámenes ginecológicos, y la correspondiente intervención de acuerdo a resultados presentes y sus proyecciones. Además existe una imperiosa necesidad de que la participación veterinaria actúe a niveles diferentes:

- evaluación del rodeo

- control reproductivo

- prevenir pérdidas (abortos, infertilidad, etc.)

debido a que la participación del profesional en ésta clase de trabajos genera información valiosa para analizar la performance del rodeo y/o grupos de animales y además recibir detalles que pueden ser críticos cuando se necesite hacer diagnósticos etiológicos.

En rodeos en que los animales paren durante todo el año, el impacto de una ineficiente reproducción puede pasar desapercibida pero no deja de ser importante desde el punto de vista económico; ya que la producción de leche decrece a medida que nos alejamos del parto.

En cambio en rodeos en los cuales las vacas son servidas y paren sobre una base estacional, las vacas deben parir en un momento del año que mejor se adecuen a las necesidades, ya sea para requerimientos de cuotas de leche o cuando es máxima la oferta de alimento. En este sistema las pérdidas económicos son considerables si las vacas no paren en los intervalos de tiempo preestablecidos en cada año.

La eficiencia reproductiva es un importante elemento que incide en los costos de producción. En efecto, un alargamiento de los intervalos entre partos significa perder leche y crías, pérdidas de posibilidades de venta de vaquillonas y más gastos de semen, afectándose en consecuencia la tasa de progreso genético del rodeo. En la explotación tambera, muchos estudios han estimado que intervalos interpartos prolongados pueden costar entre 0,25 a 4,68 pesos por cada día de vacía mayor a los 85 días post-parto. En otros estudios hasta el 40 % de los celos se perdieron en animales que normalmente ciclaban.

Existen diversos índices y fórmulas para medir la eficiencia reproductiva, que deben ser conocidos y, analizados e interpretados correctamente, por los veterinarios para poder tomar decisiones a partir de ellos. Un punto a tener en cuenta es que en muchas ocasiones los errores de omisión (fallas al tomar acción cuando es necesario o sería conveniente) podría ser menos costoso y más común que los errores de comisión (tomar acción cuando es innecesario o perjudicial)

Los índices utilizados para la evaluación de los resultados evolucionan continuamente con el tiempo y su interpretación debe ser condicionada a ello, a las características de la explotación, localización geográfica, etc. Así mismo se debe tener en cuenta que los sistemas de cálculo deben ser estandarizados para evitar falsas interpretaciones de un mismo índice.

Por otro lado, no hay que cometer el error de caer en la tentación de simplificar los resultados de una explotación en tan solo uno o dos índices reproductivos, sin tener en cuenta que éstos son simples y al mismo tiempo muy poco orientativos, analizados individualmente, como para conocer la realidad de un establecimiento, por eso es necesario realizar un análisis lo más amplio y objetivo posible de dicha realidad.

Una medida que no de una falsa tranquilidad (a pesar que ocasionalmente señala un problema donde no existe) generalmente cubre las necesidades de manejo mejor que una que da una falsa tranquilidad.

Las medidas de rendimiento que incluyen valores de parámetros recientes y pasados deben ser vistos con ciento escepticismo con respecto a que tan bien reflejan el rendimiento actual. Tales medidas pueden ser usadas para comparar los progresos de un punto a otro si son examinados los valores individuales y su distribución.

Las medidas de rendimiento que incluyen valores anteriores al pasado reciente pueden enmascarar los efectos de un rendimiento negativo reciente y por lo tanto llevar a una complacencia injustificada; o, tales medidas pueden oscurecer positivos cambios de manejo recientes y por lo tanto llevar a una injustificada insatisfacción.

El rendimiento pasado podría no reflejar confiablemente el rendimiento actual, por lo tanto, identificar la existencia y nivel de los problemas actuales, lo cual es generalmente más importante que determinar la causa de los problemas pasados.

Un promedio que cubre un objetivo aceptable no indica que no haya puntos individuales que necesitan atención inmediata o que no haya pérdidas. Es casi siempre necesario:

- examinar patrones de distribución de los valores individuales en el cálculo del promedio

- identificar los individuos con rendimientos por debajo de los objetivos.

Un promedio que cubre un objetivo aceptable podría dar una falsa tranquilidad si unos pocos individuos de alto rendimiento están compensando la mayoría de las vacas que no alcanzan el rango deseado. Por el contrario, un promedio que no cubre un objetivo aceptable podría llevar a una preocupación innecesaria si unos pocos individuos de pobre rendimiento están haciendo que el promedio se desvíe fuera del rango aceptable.

Este trabajo solo trata de dar una orientación de los distintos índices que se presentan en la práctica reproductiva, dejando a criterio personal la elección e implementación de los mismos, ya que ello marcara la diferencia entre los distintos criterios que sobre reproducción tenga cada uno de los profesionales.

Indices utilizados en rodeos de parición continua

Promedio de días en lactancia

El ordeño de vacas en fase final de lactación es menos rentable debido a que la producción está en declive. El objetivo económico ha sido determinado en una media de 150 - 170 días en lactancia.

IPP (Intervalo entre partos)

Es un parámetro histórico que resulta de sumar los intervalos entre partos individuales y dividirlos por el número de vacas estudiadas. Es indicativo de la performance pasada.

Tiene la ventaja de que al tratarse de un índice histórico, no se ve afectado por pequeñas fluctuaciones temporales. Es muy sensible a los rechazos.

También tiene desventajas que son las de no indicar problemas reproductivos recientes o actuales ni cambiar rápidamente después de solucionar un problema de infertilidad en la explotación.

Quedan excluidos de este calculo las vacas de 1° parto y los animales rechazados; así como también los animales que hemos decidido no inseminar pero aún conservados en la explotación.

IPPP (Intervalo parto - parto proyectado)

Resulta de sumar 282 días al intervalo parto concepción promedio de todas las hembras confirmadas preñadas. Muestra una proyección del IPP futuro de todas las vacas preñadas, el cual nos sirve para comparar con el IPP actual y, en cierta forma, chequear en parte la evolución de un programa reproductivo; es muy importante no evaluarlo solo.

IP1°C (Intervalo Parto - 1° celo)

Es el promedio de días entre el parto y el 1° celo visible. Es un indicador de la eficiencia de detección de celos, manejo del rodeo y estado nutricional.

IP1°S (Intervalo Parto - 1° servicio)

Es la media de días entre el parto y el primer servicio de todos los animales cubiertos en los últimos 12 meses. Es un índice que se halla elevado en gran parte de las explotaciones ya que generalmente empiezan a inseminar a los 60 días por lo que la media de días es de 75 - 80 días, incidiendo en muchos de los demás índices reproductivos.

IPC (Intervalo parto concepción)

Sinónimo: Días Abiertos

Se obtiene de promediar el número de días desde el parto hasta la preñez confirmada. Solo tiene en cuenta animales en gestación.

Tiene la ventaja sobre el IPP que no necesitamos esperar la confirmación del parto sino de la preñez de la vaca. Si se trabaja sistemáticamente tendremos un indicador de los resultados reproductivos más recientes, incluyendo los animales en primera lactancia.

El inconveniente es que solo tiene en cuenta los animales gestantes, por lo que no se incluyen los animales menos fértiles aún no preñados ni los eliminados por problemas reproductivos; siendo de este modo muy sensible a los rechazos.

Se trata de un índice que puede reflejar mejor que el IPP la realidad reproductiva actual de un rebaño, pero que debe analizarse conjuntamente con los rechazos reproductivos y el porcentaje de vacas vacías a los 150 días de lactancia. Es muy importante tener en cuenta los días a la 1° IA al analizar este índice.

La incidencia elevada de abortos, después de la obtención de este índice, afecta los resultados reproductivos finales.

Eficiencia de Retención de Servicios

La eficiencia de retención a servicio, surge de evaluar la cantidad de hembras confirmadas preñadas en un determinado servicio sobre el total de esos servicios dados.

% PREÑEZ a 1° Serv.

“ a 2° Serv.

“ a 3° Serv.

Nos permite evaluar la performance reproductiva de machos y hembras. no podemos evaluar la muerte ovular, ni la muerte embrionaria precoz; pero si, en un gran porcentaje de los casos, muerte embrionaria tardía (31 - 42 días)

% P.G. (% de preñez general)

El porcentaje de preñez general del rodeo se obtiene de calcular las hembras confirmadas preñadas del total del rodeo en un período de tiempo determinado.

I.I.(Indice de inseminación)

Se obtiene de dividir la cantidad de servicios realizados en todas las hembras durante un período determinado de tiempo, sobre la cantidad de vacas confirmadas preñadas en el mismo período. Incluye rechazos, muertas, etc.

I.G. (Índice de gestación)

Sinónimos: Índice de preñez, Servicios por preñez.

El índice de gestación resulta de dividir la cantidad de servicios dados en las hembras confirmadas preñadas sobre la cantidad de hembras preñadas en los últimos 12 meses..

Adquiere valor al ser relacionado con el IPC. Puede ser utilizado como indicador de la fertilidad del toro si se tiene la certeza de la salud reproductiva de las hembras.

Eficiencia de detección de celos

La detección de celos es uno de los problemas más importantes en los rodeos lecheros y es uno de los factores que afecta más la eficiencia reproductiva.

Existen muchas maneras de calcularlo; aquí solo daremos una de ellas:

N° de celos detectados

(C.N. + 2 C.D. + 3 C.T.) x 100

donde:

C.N. = Celos precedidos de un intervalo normal (17/24 días)

C.D. = Celos precedidos de un intervalo doble (34/48 días)

C.T. = Celos precedidos de un intervalo triple (51/72 días)

% Vacas repetidoras

Porcentaje de vacas servidas más de X veces. El numero de servicios que se tome como límite para evaluar este índice puede variar de un establecimiento a otro, debido a que tengan sistemas de producción muy distintos, la exigencia del profesional actuante, la capacidad del personal u otros factores condicionantes que así lo determinen.

% Hembras abiertas más de...:

Surge de evaluar la cantidad de vacas del rodeo que superen un número determinado de días post-parto sin confirmación de preñez.

% de Abortos

Se obtiene al calcular el porcentaje de animales confirmados preñados que posteriormente son observados vacíos (por aborto manifiesto o no), comparados con el total de los animales del rodeo. Este indicador puede ser desglosado por tercios, de acuerdo al momento de la preñez en que sucedieron, lo cual nos será de mucha utilidad en el caso de tratarse de un aborto de tipo infeccioso o parasitario; ya que los mismos se presentan, por lo por lo general, en momentos determinados de la gestación dependiendo del agente causal.

% de Descartes

Se determina a partir de la cantidad de hembras rechazadas en un período de tiempo determinado, pudiéndose subdividir de acuerdo a las diferentes causas del mismo.

Es imprescindible su conocimiento, ya que la mayoría de los demás índices deben ser calculados conjuntamente con el porcentaje de descartes para ser indicativos.

% de Mortalidad Perinatal

Surge de evaluar la totalidad de los nacimientos muertos y de los terneros muertos durante el período calostral.

Los índices recomendados para evaluar la eficiencia reproductiva en rodeos continuos pueden agruparse de la siguiente forma:

a) Índices generales de eficiencia reproductiva.

Intervalo parto 1° celo (IP1°C)

Intervalo parto 1° Servicio (IP1°S)

Intervalo parto concepción (IPC)

Promedio de días de vacía para las vacas vacías.

Porcentaje de vacas vacías con más de 120 días de paridas.

Intervalos entre partos (IPP)

Promedio de días en lactancia

Rechazo de animales por problemas reproductivos.

 

b) Índices de eficiencia de detección de celos

Porcentaje de posibles celos detectados

Porcentaje en celo dentro de los 40-50-60 días de parida.

Proporción de períodos intercelos (1°-2°)

Porcentaje de vacas preñadas al diagnóstico de preñez.

 

c) Índices de eficiencia en la concepción

Porcentaje de preñez al primer servicio

Porcentaje de preñez al segundo servicio

Porcentaje de preñez al tercer servicio

Porcentaje de preñez general

Índice de inseminación (I.I.)

Índice de gestación (I.G.)

Porcentajes de abortos

Abortadas en 1° trimestre

Abortadas en 2° trimestre

Abortadas en 3° trimestre

Índices reproductivos en rodeos estacionales

En rodeos estacionados aquellas vacas que no se preñan rápido son las que crean los problemas. En estos rodeos, el intervalo entre partos o fundamentalmente el promedio de días de vacía, no son los indicadores más adecuados debido a lo corto de la temporada de servicios.

Las mediciones usadas en rodeos estacionales intentan describir la naturaleza sesgada de los partos que comienzan con un fecha planeada de inicio de partos (FIP).

Un rodeo lechero con partos estacionales se basa en la decisión de cuándo empezar la temporada de servicios en una fecha particular. Esta FIP puede variar entre primíparas y multíparas; por consiguiente, sus respectivos patrones de partos pueden y deben ser considerados separadamente.

Existen dos índices que describen a la temporada de partos y su dispersión:

El primero es el llamado “porcentaje de partos” que representa la cantidad de vacas aptas que paren en un período de tiempo en relación al FIP. Estos períodos de análisis son generalmente semanales ya que el ciclo estral del bovino contempla 21 días como promedio y los podemos dividir por semanas. El porcentaje de partos se define como la proporción de vacas aptas a parir, en la cual lo han hecho a una fecha definida relacionada con la FIP.

Los factores que influencian los patrones de partos son.

- las decisiones de venta

- las prácticas de inducción y

- los patrones de concepción. (% sumisión, % concepción, duración del período de servicio).

El segundo índice se lo denomina “dispersión de partos” y se lo mide basándose en el número de días que tarden en parir un porcentaje determinado de animales aptos del rodeo.

El intervalo del FIP a la fecha promedio de partos (FPP) indicará cuántos días de lactancia han sido ganados o perdidos por la vaca promedio, comparado con otro rodeo y/o grupo dentro del mismo establecimiento.

Los distintos patrones de partos pueden ser descriptos midiendo los siguientes intervalos:

FIP-FPP (fecha inicio de pariciones - fecha promedio de pariciones)

Es el intervalo desde el FIP en el cual parieron el 50% de las vacas o vaquillonas. Representa el tiempo en días que tarda en parir el 50% del rodeo desde la fecha de inicio de partos y refleja el resultado relativo de la primera parte del programa de servicios de la estación previa.

En el calculo de este intervalo, el día del FIP debe ser incluido; al igual que las vacas que paren antes de dicha fecha (en promedio 6 - 8% del rodeo para antes del FIP).

IPP-75 (intervalo promedio de partos - 75% pariciones)

Representa el número de días que tarda en parir el próximo 25%; es decir desde el FPP al 75% de los partos del rodeo. Aquí se reflejan los resultados de la segunda etapa de servicio, cuando el interés por la detección de celo frecuentemente declina y, alternativamente, los efectos que contribuyen a bajar el porcentaje de concepción (%C) en la primera parte del programa de servicio previo pueden no persistir.

I.75 F. ( intervalo 75% de pariciones - final de pariciones)

Representa el numero de días que tarda en parir el 25% restante del rodeo; es decir desde el 75% a la finalización de los partos. El último parto se define como la fecha a partir de la cual ninguna vaca parió en los siguientes 7 días. Esta decisión no excluye a más del 3% de las vacas del rodeo.

Este es el intervalo que más probablemente sea influenciado por la longitud del programa de servicios, el porcentaje de inducción de partos (%I.) en la actual estación y el estado del programa de partos en el momento en que las inducciones fueron iniciadas.

ITP (intervalo total de pariciones )

La sumatoria de los 3 intervalos anteriores nos dan la dispersión total de los partos. Este intervalo, junto con el anterior (I.75 F.), indica si las vacas paridas tardíamente tendrán suficiente tiempo para recomenzar su ciclo estral normal antes del próximo FIP o cerca del final de las tres primeras semanas de servicio.

A su vez, estos intervalos son influenciados por la eficiencia y la efectividad del manejo en el servicio previo.

Patrones de concepción

Es el factor que más influye en los patrones de partos y se define como el porcentaje de vacas aptas preñadas en un definido período de tiempo en relación a la fecha programada de inicio de los servicios.

Los patrones de concepción se basan en: la fecha para el inicio del servicio artificial (ISA), el intervalo promedio del ISA a la primera inseminación (ISA-1°I), el intervalo promedio del ISA a la concepción (ISA-C), y en la distribución porcentual por semana de estas inseminaciones.

Porcentaje de sumisión

Se define como el porcentaje de vacas aptas inseminadas por primera vez en un período definido de tiempo a partir de la fecha de inicio del servicio. Comúnmente se usa el período en los primeros 21 días de servicio. Esta es una medida sumamente útil y fácil de calcular, cuyo valor resultante puede ser obtenido rápidamente evaluando en forma inmediata la performance presente del rodeo.

Otra medición complementaria a la anterior y de mucha utilidad para esta clase de servicios estacionados, es el porcentaje de celos previos al inicio de la temporada de servicios. Este índice es muy importante para evaluar y proyectar por anticipado el grado de actividad reproductiva del rodeo y comúnmente se lo expresa como el porcentaje de animales aptos que se observan en celo antes de 24 -28- 30 días previos a la fecha programada del inicio de la temporada de servicios.

Porcentaje de concepción

Se define como la proporción de servicios que dan como resultado una preñez. Los dos indicadores que se usan para estimar el porcentaje de concepción son: porcentaje de preñez propiamente dicho y porcentajes de no retorno.

El porcentaje de preñez se define como la proporción de servicios que han sido positivamente confirmados preñados.

El porcentaje de no retorno ha sido definido como la proporción de servicios que no han retornado dentro de un definido número de días posteriores a la inseminación. Esto puede hacer cometer errores porque se basa en que tiene que haber una muy buena detección de celos.

Otro índice que se usa en rodeos estacionados es el porcentaje de animales vacíos. Representa la proporción de vacas que quedaron vacías de las que comenzaron los servicios, en un período de tiempo definido luego de iniciada la temporada.

Como último punto cabría agregar que las comparaciones entre establecimientos deberían hacerse teniendo en cuenta todas las variables que interactúan en los distintos sistemas productivos, ya que dos establecimientos con similares parámetros reproductivos podrían estar teniendo niveles de pérdidas o ganancias muy disímiles si es que los sistemas de producción de uno y el otro están muy alejados entre sí; por lo cual las variables antes mencionadas van a ser distintas o, siendo iguales, pueden actuar o incidir de forma diferente sobre el sistema productivo en cuestión.